Cambio climático en Venezuela | El impacto del cambio climático en Venezuela se ha intensificado en las últimas décadas, afectando desde las temperaturas y los patrones de lluvia hasta la agricultura, la salud y, en particular, la geografía de los Andes venezolanos. Expertos en medioambiente alertan que el país ha perdido el 100% de sus glaciares en los últimos 100 años y que la región andina ha visto desaparecer más del 50% de su masa de hielo desde 1980, lo que supone un cambio alarmante en su ecosistema.
Adiós al hielo andino: una pérdida irreversible para Venezuela
Venezuela ya no cuenta con glaciares activos. Esta alarmante realidad fue confirmada por la periodista ambiental Helena Carpio, quien explicó que en tan solo un siglo, el país ha sido testigo de la desaparición completa de sus glaciares debido al calentamiento global acelerado. Además, la cordillera de los Andes venezolanos ha perdido más de la mitad de su hielo desde la década de los 80, lo que representa una transformación sin precedentes para esta región. ¿Por qué desaparecen los glaciares?
El incremento sostenido de la temperatura global ha modificado la dinámica natural de los ecosistemas de altura. Al calentarse la atmósfera, se altera el ciclo del agua, lo que genera mayor retención de humedad. Esto, a su vez, desencadena lluvias más intensas en periodos más cortos, y la aceleración del derretimiento de masas de hielo.
Fenómenos extremos: lluvias más violentas, calor más intenso
La periodista Carpio también indicó que los eventos meteorológicos extremos son cada vez más frecuentes en el país: olas de calor prolongadas, lluvias torrenciales, sequías irregulares y nevadas repentinas. Todo esto responde a un patrón mundial causado por el cambio climático.
Según el último informe del Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC) de 2023, se prevé que llueva menos días al año, pero con mucha más intensidad, lo que puede generar inundaciones rápidas, deslizamientos de tierra y pérdida de cosechas.
Agricultura en riesgo: el 90% depende de la lluvia
Uno de los sectores más vulnerables es el agrícola. En Venezuela, más del 90% de los cultivos dependen exclusivamente de las lluvias naturales, ya que no cuentan con sistemas de riego tecnificado. Esto significa que cualquier alteración en los patrones de precipitación afecta directamente la producción de alimentos.
“En algunas zonas, las plantas no recibirán suficiente agua y no crecerán. En otras, lloverá tanto que los cultivos se pudrirán por falta de drenaje”, advirtió Carpio.
Enfermedades en expansión: la malaria llega a nuevas regiones
El impacto sanitario del cambio climático también empieza a ser evidente. Enfermedades como la malaria, tradicionalmente restringidas a regiones cálidas y húmedas del sur de Venezuela, ahora se están expandiendo hacia zonas como los Valles del Tuy. Esto ocurre porque el aumento de temperatura modifica el hábitat de los mosquitos transmisores.
AMOC y su rol en el caos climático
Por su parte, el profesor Oswaldo Felizzola, del Centro Internacional de Energía y Ambiente del IESA, explicó que la situación también se ve agravada por la Corriente Meridional de Retorno del Atlántico (AMOC), que actualmente está absorbiendo más energía solar de la habitual debido a la reducción de la capacidad de la Tierra para reflejarla.
“Esa energía se almacena y tiene que desplazarse. Esto provoca mayor evaporación de agua, más nubosidad y más lluvias intensas. Es lo que estamos viendo en Venezuela”, comentó Felizzola.
¿Cuánto se ha calentado el planeta?
Desde la Revolución Industrial, la temperatura promedio del planeta ha aumentado en 1,4 °C, según datos recientes. Esta cifra, aunque pueda parecer baja, tiene consecuencias catastróficas, sobre todo para países tropicales y en desarrollo como Venezuela.
¿Qué se puede hacer frente al cambio climático en Venezuela?
Tanto Carpio como Felizzola coinciden en que algunos efectos pueden mitigarse, pero otros son irreversibles. Es fundamental adoptar políticas de adaptación climática, invertir en agricultura sostenible, fortalecer los sistemas de salud y mejorar el monitoreo ambiental.
Además, es necesario que Venezuela se sume activamente a los compromisos internacionales de reducción de emisiones, mientras se educa a la población sobre la urgencia de este fenómeno global.
Los Andes se derriten y el país cambia
El derretimiento de los hielos andinos es solo una señal más de una crisis ambiental que ya está en marcha. Aunque muchas veces pasa desapercibida en la opinión pública, sus efectos ya impactan la vida diaria de millones de venezolanos: en los alimentos, en la salud, en la infraestructura y en el equilibrio de los ecosistemas.
Desde Notilara.com seguiremos informando con profundidad y responsabilidad sobre los efectos del cambio climático en Lara, en Venezuela y en el mundo, porque la conciencia colectiva es el primer paso hacia la acción.